Ya conté en entradas anteriores la costumbre que hay aquí de darse la manita entre
hombres. Os confieso que puedes acostumbrarte a verlo, pero por muchos años que vivas en la India, un occidental nunca se acostumbrará a hacerlo...Es más, cada vez te pones más nervioso el roce continuo entre hombres.
Y es que vamos a ver, hay un hecho real y comprobable y es que a los Indios les atraen las aglomeraciones. Si hay una playa de varios Km de largo, ellos se juntarán todos en el mismo sitio donde el primero puso la toalla. Si vas a hacer treking a la montaña más remota y te buscas una piedra aislada en un sitio silencioso, al rato aparecerán grupos de Indios a tu alrededor atraídos por esa mística fuerza de lo que yo llamo la "gravedad humana" (o también el gusto por el roce).
Y lo cierto es que para un occidental es realmente desconcertante que si estoy haciendo una cola en el super, banco o cualquier sitio, venga otro y se ponga tan detrás tuya que te frote la cebolleta. Pero qué necesidad hay de eso!! Mil veces les he explicado a la gente que se pone detrás mía que por favor, deje espacio, pero no lo entienden ya que piensan que si no te tocan, alguien se colará en el espacio entre los dos. Y así te pasas la vida haciendo trenecitos como el que estos tres montan en la cola del banco central de Navi Mumbai, donde suelo ir a menudo.
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